Este fin de semana he estado en Asturias compartiendo “espichas”; compartiendo músicas, gracias a Javi y al improvisado y agradable coro; compartiendo sueños “azules”, solidarios y transformadores de una casa, La Casa Azul, la de Fausti y tanta otra gente comprometida con otra calidad de vida; compartiendo la existencia impensable, pero cierta, de la Fundación EDES, la de Susana, una escuela “especial” y concertada, si, has leído bien, concertada, aunque enraizada en lo rural; compartiendo “tonterías” de la increíble y divertidísima “Pequeña compañía de nenos enormes”, no os los perdáis si aterrizan por vuestro pueblo que suponen un soplo de salud mental siempre necesario; compartiendo experiencias en aulas de maestras con muchos años en su mochila, como Nina o Conchi, pero con la ilusión, la fuerza y la sonrisa del primer día, o de maestras como Salomé, recién llegada y perdida en un pueblo de montaña leonés, pero que descubrió y nos transmitió la magia y el milagro que se esconde, como un pequeño tesoro, en las paredes de estas escuelas, o de José Manuel, con sus sonidos y sus músicas colectivas; compartiendo debates con Pedro, viejo amigo, viejo luchador y gran conocedor de la historia y las realidades de la escuela rural; compartiendo conversaciones con Paco, que con su amor por la escuela rural y por su chica se asomó a abrazarnos y me contaba de sus trabajos para que el software libre también florezca por la educación asturiana; compartiendo con Javier y su mujer el calor de una vieja estufa de leña que ahumaba la clase en esas montañas en otros tiempos, cuando la escuela rural era “rural”; compartiendo con Manuel su empuje y sus ganas de que las cosas vayan a mejor y que para contárnoslo y conocernos se cruzó medio país en coche, desde Castellón hasta Asturias nada menos; compartiendo con Jandro su paso por un gran cole elitista de ciudad que no pudo soportar y que ahora tiene el corazón y la vida entre su tierra asturiana y los amores turolenses; compartiendo con Ester su esfuerzo para que en la Universidad también quepa una puerta para la escuela rural y podamos transitar por ella y “observarla” con calma y detenidamente; compartiendo, sobre todo, el trabajo permanente y “jornadero” del Seminario de escuela rural del noroccidente de Asturias, Nina, Marisa, Conchi, Susana, Fausti, Marta, José Antonio,… que se ha atrevido a volar sin el paracaídas de una administración encorsetadora y castradora alejada de la realidad, y las reflexiones sobre la escuela rural, esa “mujer negra y zurda” que veía José Antonio, gracias por tus silencios y tus dudas finales que tanto nos dicen; compartiendo, en fin, las inseguridades, las propuestas, las inquietudes, Maite disculpa por no tener más tiempo para hablar de metodologías, ójala encontremos otros momentos que seguro que merece la pena que nos cuentes lo que vas descubriendo en tu día a día de maestra de pueblo, y las de otras maestras, maestros y madres que allí nos encontramos.
Manuel, gracias por tu “politización” siempre tan necesaria, preguntaba en la última sesión no por sesudas y argumentadas conclusiones, sino por sensaciones y las mías están claras, muy claras, porque aquellas pequeñas escuelas de Valdepares (El Franco) y As Figueiras (CRA Tapia-Castropol) que rezumaban vida por todas sus paredes, felicidades maestras, Mª Eugenia y Asún, que a gusto se estaba allí, se llenaron de afecto, ilusión, energía y vitalidad a pesar de los puntos rojos del mapa escolar de vuestra tierra que nos contemplaban, las muchas escuelas muertas de muerte “morida” y las otras muchas fenecidas por una muerte “matada”; a pesar de una administración asturiana para la que lo rural y su futuro es un estorbo y decide llevar niños y niñas con el dinero público a otras escuelas más grandes apoyando y apostando por la muerte “matada” de sus escuelas y de sus pueblos con ellas; a pesar de un Centro de Profesores en Luarca que para hablar de escuela rural con el resto de Comunidades Autonómas da la espalda y sabotea con “su” propio Congreso y “sus” propias Jornadas a sus maestras, maestros y familias rurales que llevan años y años trabajando y luchando por esas escuelas, y todo porque se empeñan en crear redes sin importar si son de la misma escuela o no, porque el campo y la mar no tienen fronteras, pero por ese empeño se estrellan contra los impresos de esos centros de profesores que no disponen de la casilla para poder ser acogidas y acogidos, que paradoja más lamentable y mafiosa; a pesar de familias y ayuntamientos que creen la gran mentira de que la calidad educativa está en amontonar a los niños y a las niñas en grandes centros, cuantos más mejor parece su lema, en clasificarlos y etiquetarlos por edades, en ponerlos en autobuses innecesarios para que así su vida, la de las familias, sea un poco más cómoda y barata; a pesar del SAUCE, el programa de gestión informática de centros, que no tiene bits rurales y constituye un auténtico quebradero de cabeza y de tiempo conseguir que se introduzcan horarios y datos reales, algo imposible la mayor parte de las veces, de escuelas olvidadas en los pueblos; a pesar de todos estos pesares, y otros que se fueron desgranando, sabemos, nos lo contaba hace muchos años José Agustín Goytisolo con la voz de Paco Ibáñez, que a pesar de los pesares la vida es bella y tendremos amores, amigas y amigos, que es lo que al final nos importa.
Y también sentí una especial admiración, teniendo en cuenta la galerna arrasadora que nos acecha tras cada nueva norma y decisión administrativa, escuchando a las dos “Mares”, dos madres, más bien dos océanos de sentido común y afecto, que convivieron con nosotras y nos empaparon y nos acariciaron con su lucha diaria para que las escuelas de sus pueblos no murieran de muerte “matada” porque siguen deseando para sus hijos e hijas, en estos tiempos, que cosas, la posibilidad de pasear por las calles de su pueblo al ir cada día a su escuela, de respirar y disfrutar de las personas y los aromas conocidos y cercanos, de que aprendan que hay cosas, como los afectos y las raíces para agarrarse fuertes en la vida, que fuera de su medio se resecan y no crecen.
Gracias, gracias a todas por el regalo de compartir estos momentos, de ayudarme a recargar las fuerzas, de confirmar y transmitir, yo lo he sentido en vuestras voces, en vuestras miradas y en vuestros gestos, que, aunque la escuela rural todavía sigue siendo minoritaria, invisibilizada legalmente y homogeneizada por la CRAsificación que padece, gracias Rogeli por el palabro, y acosada por multinacionales y administraciones digitalizadoras y mercantilizadoras, la escuela rural, decía, todavía es una escuela viva, una escuela posible y enriquecedora, un modelo educativo exportable a otras escuelas más grandes y urbanas, por el que merece la pena comprometerse y trabajar cada día para que, como nos recordaba Pedro parafraseando al viejo Llach, nazcan flores a cada instante.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
¡Ya me hubiera gustado estar con vosotros! Veo que disfrutaste del “alma” de gente vinculada a la escuela rural.
Me alegra EVIDENCIAR, NUEVAMENTE, QUE LA ESCUELA RURAL SIGUE PESE A QUE HACE VARIAS DÉCADAS QUE INTENTARON ELIMINARLA CON LOS PLANES DE DESARROLLO Y LAS NORMAS EDUCATIVAS VINCULADAS (década de los 60 y 70), pese a los lloros y oscuros augurios de la década de los 80, que al mismo tiempo comportaban EL REINCIDIR SOBRE LA EXISTENCIA DE LA ESCUELA RURAL, PESE A LA LOGSE, LAS CONCENTRACIONES DE LA ESO Y LA CRASIFICACIÓN MASIVA, si no generalizada… y a la incerta LOE, que aportó muy poco de forma específica para la mejora de la escuela rural.
AHORA EL FUTURO DEL MEDIO RURAL SIGUE LOS DERROTEROS DE LA LEY DE DESARROLLO RURAL SOSTENIBLE DE 2007… que debe afectar también a la educación y en muchos casos casi la olvida… COMO OCURRIÓ CON EL DESARROLLO DE LA LEY DE AGRICULTURA DE MONTAÑA DE 1982.
Hay que salir. Hay que decir. Hay que demostrar… que la escuela rural existe y que es necesaria para el futuro del medio rural y de toda nuestra sociedad ya que se ha comprobado su relación con el mantenimiento de la población rural o su deterioro en caso de ausencia de escuela, así como el papel que deben desarrollar los centros de secundaria y de adultos en la red social de cada zona rural.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
¡Ya me hubiera gustado estar con vosotros! Veo que disfrutaste del “alma” de gente vinculada a la escuela rural.
Me alegra EVIDENCIAR, NUEVAMENTE, QUE LA ESCUELA RURAL SIGUE PESE A QUE HACE VARIAS DÉCADAS QUE INTENTARON ELIMINARLA CON LOS PLANES DE DESARROLLO Y LAS NORMAS EDUCATIVAS VINCULADAS (década de los 60 y 70), pese a los lloros y oscuros augurios de la década de los 80, que al mismo tiempo comportaban EL REINCIDIR SOBRE LA EXISTENCIA DE LA ESCUELA RURAL, PESE A LA LOGSE, LAS CONCENTRACIONES DE LA ESO Y LA CRASIFICACIÓN MASIVA, si no generalizada… y a la incerta LOE, que aportó muy poco de forma específica para la mejora de la escuela rural.
AHORA EL FUTURO DEL MEDIO RURAL SIGUE LOS DERROTEROS DE LA LEY DE DESARROLLO RURAL SOSTENIBLE DE 2007… que debe afectar también a la educación y en muchos casos casi la olvida… COMO OCURRIÓ CON EL DESARROLLO DE LA LEY DE AGRICULTURA DE MONTAÑA DE 1982.
Hay que salir. Hay que decir. Hay que demostrar… que la escuela rural existe y que es necesaria para el futuro del medio rural y de toda nuestra sociedad ya que se ha comprobado su relación con el mantenimiento de la población rural o su deterioro en caso de ausencia de escuela, así como el papel que deben desarrollar los centros de secundaria y de adultos en la red social de cada zona rural.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
Por muchos cientos de kilómetros que me hice con el coche, 2000 km, nada más y nada menos, valió la pena conocer a compañer@s que también luchan por hacer visible este tipo de escuela, la envidia del resto. Debemos, como dice Rogeli, salir, decir, demostrar que seguimos ahí, en el medio rural, enriqueciéndolo y enriqueciéndonos (en el sentido profesional), pues es más sensato partir de lo más próximo para comprender lo más lejano. Lejanas es como se encuentran las diferentes administraciones, generales y autonómicas, de la realidad de la escuela en el medio rural.
Esperemos que la nueva normativa de desarrollo sostenible rural nos ofrezca un golpe, pero no en la espalda para decir lo maj@s que somos y lo bien que hacemos, sino para apostar, realmente, por un sector de la sociedad que día a día, pese a quienes les pese, siguen y seguimos luchando por un tipo de educación de calidad.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
Por muchos cientos de kilómetros que me hice con el coche, 2000 km, nada más y nada menos, valió la pena conocer a compañer@s que también luchan por hacer visible este tipo de escuela, la envidia del resto. Debemos, como dice Rogeli, salir, decir, demostrar que seguimos ahí, en el medio rural, enriqueciéndolo y enriqueciéndonos (en el sentido profesional), pues es más sensato partir de lo más próximo para comprender lo más lejano. Lejanas es como se encuentran las diferentes administraciones, generales y autonómicas, de la realidad de la escuela en el medio rural.
Esperemos que la nueva normativa de desarrollo sostenible rural nos ofrezca un golpe, pero no en la espalda para decir lo maj@s que somos y lo bien que hacemos, sino para apostar, realmente, por un sector de la sociedad que día a día, pese a quienes les pese, siguen y seguimos luchando por un tipo de educación de calidad.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
¡Qué bien! Me has trasportado literalmente a una tierra y con una gente que admiro, de la que aprendo, con la que me ilusiono, me motivo,… comparto experiencias, emociones, sueños. ¡Qué claridad! ¡Cómo he conectado! Siento que he vuelto a estar allí y me siento solidario, comprometido y aguijonado para seguir en el aula, en el centro, en el entorno,… en esa red que vamos a construir: NOS VAN A SENTIR que decimos por aquí.
Sensaciones sobre las IXas. Jornadas de Escuela Rural de Asturias
¡Qué bien! Me has trasportado literalmente a una tierra y con una gente que admiro, de la que aprendo, con la que me ilusiono, me motivo,… comparto experiencias, emociones, sueños. ¡Qué claridad! ¡Cómo he conectado! Siento que he vuelto a estar allí y me siento solidario, comprometido y aguijonado para seguir en el aula, en el centro, en el entorno,… en esa red que vamos a construir: NOS VAN A SENTIR que decimos por aquí.