Albalate de Cinca, 09-09-2012
Preparo mi cartera para mi primer día del curso con mi grupo. Repaso mentalmente sus caras, sus gestos, sus formas de estar, su manera de relacionarse,…ya pasamos el curso pasado juntos y he aprendido a querer a cada una una de estas personicas en su singularidad y como grupo. Algunas desaparece y se incorporan otras. Me los imagino haciendo lo mismo que yo, poniendo lápices, cuadernos,… posiblemente el último estuche que le regalaron,… y, como yo, algunos recuerdos, unos pocos miedos, incertidumbres, ilusiones, esperanzas, preguntas,…
Volverán a ser mis maestros y, juntos, aprenderemos, me propongo, con el menor sufrimiento posible. Se me amontonan viejos documentos, retomo proyectos, ideas por desarrollar, tareas burocráticas que rellenar, nuevos planes para llevar a cabo, propuestas llenas de ansiedad, deseos por cumplir, actividades que probar, metas a las que llegar, sueños por cumplir,… ¿Que quito? ¿Qué dejo? ¿Por donde empiezo? Voy, vengo, desecho, recupero,…No me va a dar tiempo… Como cuando de niño me iba a ir de excursión y no sabía que poner en la maleta. Y es que empiezo un nuevo viaje, una nueva aventura, me siento, de nuevo, apasionado.
ME PREPARO LA CARTERA
QUE ABURRIDO
ME PREPARO LA CARTERA
QUE ABURRIDO